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lunes, 7 de abril de 2014

TARRAGONA



A orillas del Mediterráneo, en plena Costa Dorada, la antigua Tarraco romana nos ofrece un importante legado monumental entre extensas playas.
Su conjunto arqueológico, Patrimonio de la Humanidad, es uno de los puntos de interés de esta ciudad catalana. Desde aquí se pueden realizar numerosas excursiones  la propuesta cultural de Tarragona se complementa con la visita por una zona del litoral repleta de villas marineras, con sus apreciados sabores, sus olores y su mar. 


Si visitáis Tarragona,  para una visita rápida hay cosas que no os podéis perder, en su casco histórico que discurre entre las murallas Medievales y el Mar Mediterráneo encontraremos callejones que nos encantarán y nos transportarán al pasado, y descubriremos la Catedral de Santa María, con su escalinata y su plazuela; nos asomaremos al mar desde el Balcón del Mediterráneo y desde allí disfrutaremos de las vistas que nos ofrece su teatro Romano; no dejéis de visitar el circo romano donde se corrían carreras de cuadrigas.

En Tarragona nos sentamos a la mesa con sus mariscos,  pescados,  hortalizas o  arroces, podemos dirigirnos al Serrallo el barrio pesquero de la ciudad donde se degustan exquisiteces como las angulas del Delta del Ebro, los crustáceos de Cambrils o los langostinos de San Carlos de la Rápita, todo ello acompañado de unos vinos de Penedés o Tierra Alta, o porqué no empezar a abrir boca con sus excelentes vermuts; no podemos dejar Tarragona sin probar  su pan de cristal (si tenéis oportunidad que sea en Reus), las cocas y la salsa romescu , no os decepcionarán.




Si aún tenéis tiempo para disfrutar de los alrededores, las opciones son tan variadas como innumerables, desde pasar el día en el parque temático de Port Aventura a disfrutar de localidades bulliciosas como Salou, marineras y tranquilas como Cambrils o si nos vamos al interior: Reus, con su maravillosa ruta modernista.

Dejad tiempo libre y atreveos con rutas por la provincia, se puede destacar una excursión al Delta del Ebro y la ruta de los Monasterios del Císter, que llevará al visitante a conocer uno de los monasterios cistercienses mejor conservados  y que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad: El Monasterio de Poblet .